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EL CRISTO DE LAS AGUAS
| Allá por la segunda mitad del S XVI, en un día normal en el que los pescadores a las orillas del Tajo, trabajaban llenando sus redes, para de esa forma luego poder venderlos en la ciudad. Estando pescando junto a la presa que existía cerca del puente de Alcántara y que encauzaba la corriente hacia los molinos del artilugio de Juanelo, vieron que se deslizaba por encima del agua flotando una gran caja de madera de tosca apariencia. La gran curiosidad que los inundó en poco tiempo y las ganas de encontrar algún tipo de objeto de valor los llevó a querer atraer hacia ellos la caja, pero sorprendiendo a | 
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| todos comprobaron que la caja cuando ellos se acercaban, esta se alejaba mas haciendo vanos sus intentos de sacarla del agua, como si estuviera dirigida por alguien, la caja cuando se acercaban a ella se pasaba inmediatamente a la otra orilla. Pronto corrió la voz por la ciudad del 
          extraño suceso, ya que algunos de los azacanes que buscaban agua 
          en el rió, se encargaron de ir contando el extraño suceso 
          a todo el mundo con los que se cruzaban. De esta forma tanto como para 
          comprobar la veracidad de lo contado, otros para burlarse de los que 
          creían medio locos y todos por curiosidad bajaron al rió 
          juntándose en dicho punto una multitud de toledanos. 
 
 “EL CRISTO DE LAS AGUAS” | ||
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